Posteriormente, Don Gregorio prosiguió custodiando y preservando con gran esmero el legado familiar; sucediéndole sus hijos Cecilia, Gregorio y Sergio Álvarez Sánchez Aldana, los cuales gracias a su esfuerzo y dedicación, conservaron cuidadosamente tanto su esencia, sus muebles, sus fórmulas; así como la calidad y calidez en la atención.

Al fallecer los hermanos Gregorio y Sergio, Cecilia Álvarez continuó a cargo junto con sus cuñadas Patricia Cisneros y Lupita Durán, (viudas de Gregorio y Sergio), quienes con especial cariño, perseverancia y entrega, han mantenido la autenticidad de sus fórmulas, y a la vez se han adecuado a los cambios surgidos en el sector farmacéutico, innovando y desarrollando nuevos productos que satisfagan las necesidades de los clientes.

Gracias a la confianza obtenida de generación en generación durante más de 100 años de trayectoria, se ha logrado trascender los límites de Jalisco y distribuir actualmente por todo el País.

Concluimos afirmando, que desde su origen “Botica Jalisciense” tiene como prioridad contribuir en el bienestar de las personas y permanecer al cuidado de su «Salud y Belleza con el amor y la sabiduría de los abuelos»

¡Hoy como siempre es un gusto servirle!